Por: Carlos Angulo, Business Development & Product Marketing Manager en Ricoh Latin America
Seguramente que has escuchado la frase: “La impresión está muerta” en los últimos años. La noticia es que se trata de una declaración que está completamente equivocada. De hecho, la impresión tiene más importancia estratégica que nunca entre los líderes empresariales a nivel mundial. Y las cifras de mercado lo avalan: según un estudio reciente se prevé que el mercado mundial de la impresión 3D llegue a los $14.4 mil millones de dólares para el año 2022. Todo ello impulsado por el desarrollo de tecnología transformadora, enfoques y aplicaciones que están permitiendo a las empresas profundizar sus relaciones con sus clientes, permitiendo responder más rápido a sus expectativas a través de una experiencia personalizada.
Tecnología transformadora
Actualmente, la impresión se ha convertido en algo mucho más allá del proceso tradicional de tinta y papel. Las nuevas tecnologías de impresión permiten plásticos, metales, telas y materia orgánica para imprimir o aplicar en diferentes superficies. Esta fundamental evolución tiene enormes ramificaciones sobre cómo las empresas de todo tipo desarrollan, fabrican, entregan y mejoran sus productos y servicios. En este contexto, una de las formas de impresión con mayor evolución es la 3D.
A medida que un número cada vez mayor de industrias adopta la impresión 3D o manufactura aditiva (AM, en sus siglas en inglés) y crece la demanda de esta tecnología, las organizaciones han visto cómo llevar las capacidades de AM en el sitio ha provocado una reducción de costos, aceleración de los tiempos de producción y entrega de resultados de calidad a sus clientes. A veces, el proceso de crear una instalación de AM en el sitio puede parecer abrumador, especialmente si no se cuenta con profesionales con experiencia en la tecnología. Más allá de la capacitación del personal, hay otros retos a considerar, como garantizar que los flujos de trabajo y procesos de impresión 3D estén optimizados y gestionados de forma segura, manteniendo los dispositivos y manteniendo los costos bajo control.
¿Cómo Ricoh puede ayudarte a llevar la impresión 3D al siguiente nivel?
Ricoh trabajó con Future Engineering Developments, una empresa innovadora en soluciones industriales para crear la gama de atomizadores rotatorios MicroMist, diseñada para ofrecer un alto rendimiento en entornos exigentes. Future Engineering Developments son innovadores en el terreno de dispositivos atomizadores para procesos industriales. Su Director, Steve Rix, inventor del motor que utilizan en la actualidad muchos fabricantes de atomizadores rotatorios de alta velocidad, recurrió a Ricoh para explorar cómo la impresión 3D podría hacer realidad sus ambiciones por mejorar el rendimiento trabajando como tecnología transformadora.
Los atomizadores rotatorios se utilizan en la industria minera o en la construcción para suprimir el polvo, controlar los olores, humidificación y refrigeración adiabática. Lo hacen atomizando y pulverizando en la zona altos volúmenes de niebla ultrafina y de bajo impacto. Future Engineering Developments había inventado tres soluciones de diseño innovadoras en la gama MicroMist. La compleja geometría de los diseños significaba que sería muy difícil, si no imposible, fabricarlos utilizando cualquier método distinto a la impresión 3D.
En colaboración con los expertos de diseño de Ricoh, la impresión 3D proporcionó al diseñador la libertad para crear exactamente lo que se necesitaba para lograr un rendimiento óptimo de la pieza. Se eliminaron las típicas limitaciones de la fabricación tradicional de formas únicas y el alto coste de mecanizado, lo que resultó en una solución altamente innovadora.
Ricoh identificó que el material más eficaz para esta aplicación sería el polipropileno ya que se prestaba para un producto ligero a la vez que ultra-resistente, reduciendo 50g la masa giratoria del atomizador en comparación con su equivalente de Nylon 12. La elevada resistencia a los productos químicos del polipropileno también inclinó la balanza hacia este material para esta aplicación basada en el agua por encima de otros materiales convencionales de AM, como el Nylon.
Además, Ricoh fue más allá y solicitó la aprobación WRAS específicamente para este proyecto para declarar la resistencia del polipropileno a la entrada de agua, lo que significa que el agua puede devolverse con seguridad a la capa freática.
Ricoh trabaja ahora con Future Engineering Developments para llevar más productos nuevos desde el concepto hasta la fabricación.
En el sector de la educación, la solución Creator Lab de Ricoh incluye impresoras 3D para el aprendizaje de alumnos, en cuanto a fabricación aditiva. Esta solución ya implementada tanto en colegios como en universidades de diferentes países como Colombia, Argentina, Chile, México y Puerto Rico, ha sentado las bases del aprendizaje para la 4ta revolución industrial. Debido a que incluye tecnologías de transformación de impacto, Creator Lab permite que los alumnos puedan tener el nivel de contacto adecuado con la tecnología, conceptos, técnicas y materiales que podrán jugar un rol importante en sus profesiones en el futuro y fomentar la innovación.
En conclusión, la impresión 3D es una tecnología transformadora para muchos sectores y con los servicios de extremo a extremo que ofrece Ricoh, las empresas latinoamericanas tienen ahora un único punto de contacto para todo lo relacionado con la fabricación aditiva. Esto hace que para ellos sea más fácil entender, desplegar e implementar soluciones de fabricación aditiva que pueden ayudar a mejorar su eficiencia, su productividad y la entrada de nuevas áreas de negocio.
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